"SU TECHO ES DE ESTRELLAS, SU CAMA ES DE TIERRA, SU COBIJA ES LA LLUVIA Y SUS ILUSIONES SE LAS LLEVA EL VIENT0",
con esta frase fue bautizada nuestra primera escuela en Pereira, fueron construidas diez viviendas de emergencia, más que un techo fueron sueños cargados de muchos sentimientos, durante los tres días 60 voluntarios asistentes trabajaron arduamente, observando como las familias se compenetraban y se unificaban como una verdadera comunidad porque "techo une" y lo comprobamos fue realmente hermoso, una experiencia para nunca olvidar y repetir, igualmente nos permitió compenetrarnos e involucrarnos más, Kelly Tatiana Vargas directora de formación y voluntariado dice "el barrio está más organizado y las familias se preocupan por las otras, y nuestra conexión con ellas ha sido total" .Recogiendo las voces de voluntarios nuevos expresan los cambios que este evento les generó en su vidas permitiéndoles divisar nuevos horizontes, abriendo ventanas hacia nuevas perspectivas y lo mejor abriendo sus corazones.
Todas las familias estaban ansiosas y expectantes ante aquel acto, algo increíble el cual iba tomando forma, es allí donde nos percatamos de que los sueños más que una ilusión pueden convertirse en una realidad, en un hecho, porque soñar no cuesta nada lo que se nos hace difícil es pensar en que "¡si se puede!" pero ¡basta! Aquí estamos dispuestos a recuperar juntos esa esperanza perdida, soñar vale la pena, unir nuestras manos para construir seres humanos, familias, para construir un mundo mejor para todos y todas.
Gracias voluntarios, gracias amigos por emprender junto a nosotros este sueño, somos grandes, somos únicos.
Un techo para mi país Eje Cafetero (Pereira).